En España sabemos bien que los procesos de desahucio pueden dilatarse en el tiempo y tornarse complejos de solventar. Con un buen asesoramiento legal, los propietarios involucrados en casos de desahucio pueden y deben conocer los plazos y procedimientos para poder gestionar la situación de la mejor manera posible. Pero, ¿Cuánto tarda un desahucio en Oviedo? Bueno, vamos a tratar de responder la pregunta de la manera más plausible posible.
Jesús Martínez Junceda, abogado especialista en derecho de arrendamientos, Propiedad Horizontal e Inmobiliario, se encarga de arrojar luz sobre la materia. Cualquier duda o consulta, dejadnos un comentario y os responderemos lo antes posible.
El marco legal del desahucio en España
El proceso de desahucio se encuentra regulado por un conjunto de normativas que delinean los derechos y las obligaciones tanto de propietarios como de inquilinos.
Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU)
La Ley de Arrendamientos Urbanos es el principal marco legal que regula el alquiler de inmuebles en España. Esta ley establece las condiciones bajo las cuales los propietarios pueden reclamar el desalojo de inquilinos morosos, garantizando a su vez derechos fundamentales para ambos lados.
Conforme a la LAU, los propietarios tienen la facultad de iniciar un desahucio si el inquilino deja de abonar el alquiler. Esta legislación también incluye disposiciones sobre la duración de los contratos de arrendamiento, las condiciones de renovación y las normas sobre la fianza y demás cantidades que deben ser depositadas al inicio del contrato.
Derechos y obligaciones del propietario
Los propietarios de inmuebles arrendados cuentan con una serie de derechos que les otorgan protección en caso de impago por parte de los inquilinos. Estos derechos incluyen:
- Recibir el pago del alquiler en la fecha acordada.
- Iniciar el proceso de desahucio en caso de incumplimiento por parte del inquilino.
- Realizar visitas al inmueble, previo aviso, para verificar su estado.
- Exigir el cumplimiento de las cláusulas establecidas en el contrato de arrendamiento.
Por otro lado, también tienen obligaciones que deben cumplir, tales como:
- Mantener el inmueble en condiciones adecuadas para su uso.
- Realizar las reparaciones necesarias que no sean responsabilidad del inquilino.
- Respetar la privacidad del inquilino, no pudiendo entrar en la vivienda sin previo aviso.
Derechos y obligaciones del inquilino
Los inquilinos, por su parte, también gozan de derechos que deben ser respetados por los propietarios. Entre estos destacan:
- Disfrutar de la vivienda con tranquilidad.
- Recibir un inmueble en condiciones habitables.
- Conocer los motivos por los cuales se puede rescindir el contrato de arrendamiento.
En cuanto a sus obligaciones, deben:
- Pagar la renta en el tiempo estipulado.
- Cuidar el inmueble y devolverlo en las condiciones acordadas al finalizar el contrato.
- Notificar cualquier problema que requiera atención urgente por parte del propietario.
Este marco legal busca establecer un equilibrio entre las partes, garantizando el derecho de propiedad y, al mismo tiempo, protegiendo a los inquilinos de situaciones abusivas. Conocer estos derechos y obligaciones contribuye, seguramente, a que las partes nunca se pregunten cuánto tarda un desahucio en Oviedo u en otro lugar de España.
Pasos previos al proceso de desahucio
Antes de iniciar un proceso formal de desahucio, existen varias acciones que los propietarios pueden llevar a cabo. Estas medidas pueden facilitar la comunicación con el inquilino y, en algunos casos, evitar conflictos legales.
Intento de solución extrajudicial
La solución extrajudicial es un primer paso (muy) recomendable que busca encontrar un acuerdo entre propietario e inquilino sin necesidad de recurrir a los tribunales. La comunicación amistosa, un enfoque más conciliador, sin duda que puede ayudar a resolver problemas de impago antes de que se agraven, de manera más rápida. No siempre es coser y cantar, cierto es, pero sí que nos hemos topado en Abogados Comunidades conciliaciones fructíferas donde el inquilino se ha comprometido a regularizar su situación, lo cual es el desenlace más deseado.
Envío de burofax al inquilino
Si las gestiones amistosas no logran resultados (también muy habitual 😕), es aconsejable enviar un burofax al inquilino. Este documento debe incluir:
- La cantidad adeudada en concepto de alquiler.
- Un plazo específico, generalmente de diez días, para regularizar el pago.
El burofax tiene la ventaja de ser un medio legalmente reconocido que proporciona prueba de que se ha intentado contactar al inquilino y de los términos del requerimiento. De hecho, puede perfectamente ser utilizado como evidencia en el caso de que se deba iniciar posteriormente el proceso judicial.
Plazo de espera antes de iniciar el proceso judicial
Una vez enviado el burofax, debemos esperar el plazo indicado para permitir que el inquilino responda. Si transcurridos 30 días desde el envío del mismo, el inquilino no realiza el pago, se considerará que ha reafirmado su decisión de no cumplir con sus obligaciones.
En este contexto, el propietario tiene ya una base sólida para proceder con acciones legales si fuese necesario. Durante esta fase, los propietarios deben documentar cualquier intento de comunicación y guardar copias de los documentos enviados.
Cuánto tarda un desahucio: Inicio del proceso judicial
El inicio del proceso judicial de desahucio marca un momento crítico para propietarios e inquilinos. Lo que implica la presentación formal de la demanda ante el juzgado y el cumplimiento de ciertos requisitos legales, así como la intervención de profesionales del derecho.
Para saber cuánto tarda un desahucio, hay que conocer que el procedimiento se desarrolla en varias etapas. Las repasamos 👇:
Presentación de la demanda
La presentación de la demanda de desahucio es el primer paso formal en el proceso judicial. El propietario, a través de su abogado, debe redactar una demanda en la que se especifiquen los motivos del desahucio, así como la cantidad adeuda. Esta solicitud se presenta en el juzgado correspondiente al lugar donde se encuentra el inmueble arrendado.
Es fundamental que la demanda incluya:
- Datos identificativos del propietario y del inquilino.
- Descripción del inmueble objeto del arrendamiento.
- Motivos del desahucio, citando la falta de pago de la renta.
- Documentación probatoria, como el contrato de alquiler y los recibos impagados.
Requisitos para la admisión a trámite
Una vez presentada la demanda, el juzgado procederá a evaluar si cumple con todos los requisitos establecidos por la Ley de Arrendamientos Urbanos. El contenido de la demanda ha de ser claro y estar bien fundamentado. Los requisitos incluyen:
- Que la demanda esté firmada por un abogado.
- Que se aporte la documentación necesaria que respalde la solicitud.
- Que la solicitud sea presentada dentro del plazo legal, es decir, con un mes de impago mínimo.
Si se cumplen estos requisitos, el juzgado admitirá la demanda a trámite, iniciando así oficialmente el proceso judicial de desahucio.
Rol del abogado y del procurador
Al abogado especialista en desahucios le toca redactar la demanda, presentar toda la documentación y representar al propietario en el juicio.
Por su parte, el procurador tiene la función de representar a la parte demandante ante el juzgado, asegurando que se cumplan los trámites administrativos correspondientes. Su labor incluye:
- Presentar la demanda y los documentos necesarios en el juzgado.
- Recibir las notificaciones del juzgado y comunicar al abogado cualquier novedad en el proceso.
- Asistir al abogado en la gestión de los plazos procesales.
Representación judicial y procuraduría
La representación judicial es obligatoria en los procedimientos de desahucio. Tanto el abogado como el procurador deben ser titulares de un título que les acredite para actuar en nombre de la parte demandante. Esto garantiza que el proceso se realice conforme a la normativa vigente y que se respeten todos los derechos de los implicados. La falta de representación legal puede llevar a la inadmisión de la demanda o a la nulidad de ciertos actos procesales.
Plazos procesales y notificación al inquilino
Para saber cuánto tarda un desahucio, hay que contar con que el proceso va a requerir el cumplimiento de una serie de pasos y plazos. El principal no es otro que la notificación al inquilino de los procedimientos legales en curso para lograr su desahucio de la vivienda.
Pero primero, hay que presentar la demanda de desahucio en el juzgado, quien tiene la responsabilidad de admitirla a trámite. Este proceso no es inmediato y puede variar en duración según varios factores.
Generalmente, la admisión puede demorarse desde unos pocos días hasta varias semanas, dependiendo de la carga de trabajo del juzgado y de su eficiencia administrativa. En algunos casos, el retraso puede ser significativo, lo que impacta en el total del tiempo que tardará el desahucio en su conjunto.
Notificación al inquilino
Tras la admisión de la demanda, se procede a notificar al inquilino. La notificación se realiza a través de un acto formal, que generalmente implica la entrega de un documento en el que se le informa de la demanda.
Sin embargo, localizar al inquilino puede presentar dificultades. Si el inquilino no se encuentra en su domicilio, el proceso de notificación puede retrasarse considerablemente. En tales casos, puede ser necesario acudir a métodos alternativos como la publicación de edictos, lo que puede suponer un tiempo adicional.
Procedimientos si el inquilino no es localizado
Si se presenta la situación en que el inquilino no puede ser localizado, se deben seguir ciertos procedimientos específicos. Estos incluyen:
- Intentos de exposición del anuncio de la demanda en el tablón de anuncios del juzgado.
- Publicaciones en periódicos locales, para garantizar que el inquilino tenga acceso a la información.
Estos métodos pueden alargar significativamente el proceso, añadiendo más días a la duración total del desahucio. La ley establece que estos intentos de notificación deben ser realizados de manera diligente para salvaguardar los derechos de todas las partes involucradas.
Días hábiles para la contestación del inquilino
Una vez que el inquilino recibe la notificación, la ley le otorga un plazo específico para presentar su contestación a la demanda. Este período se determina en un máximo de 10 días hábiles. La respuesta del inquilino puede variar dependiendo de su decisión de aceptar la demanda o de oponerse a ella.
La aceptación de la demanda por parte del inquilino permite que el proceso avance con mayor rapidez, mientras que, si decide oponerse, se dará inicio a un juicio formal.
Respuesta del inquilino a la demanda de desahucio
La respuesta del inquilino a una demanda de desahucio, dependiendo de cómo sea su actuación, obligará al procedimiento legal a avanzar de una forma u otra. Y claro, los plazos y la resolución del caso se verán afectados.
Hay dos claras opciones:
Aceptación de la demanda
Cuando el inquilino acepta la demanda, reconoce las razones expuestas por el propietario y no presenta defensa alguna. En este caso, a la pregunta de cuánto tarda un desahucio, el proceso judicial tiende a ser más rápido. La aceptación implica que el inquilino no cuestiona la validez del desahucio ni la cuantía adeudada.
Este escenario favorable para el propietario puede resultar en que el juez emita una sentencia a favor del desahucio en un breve periodo, generalmente en unos pocos meses. El tiempo exacto dependerá de la carga de trabajo del juzgado y la rapidez de los trámites correspondientes.
Oposición a la demanda
En cambio, si el inquilino decide oponerse a la demanda, este acto genera un prolongado proceso judicial. La oposición puede basarse en diversas razones, entre las que se incluyen errores en la demanda, la existencia de pagos no contabilizados o consideraciones sobre la legalidad del desalojo.
La oposición activa implica que se programará un juicio donde ambas partes presentan sus argumentos. Este tipo de respuesta puede alargar considerablemente la duración del procedimiento, ya que se requerirá más tiempo para preparar la defensa y llevar a cabo la vista oral. En algunos casos, la oposición se puede extender durante varios meses, incluso años, especialmente si hay apelaciones posteriores.
Preparación para el juicio
En vísperas de un juicio, tanto el inquilino como el propietario deben estar listos para presentar evidencias y argumentos ante el juez. Las fechas del juicio dependerán de la disponibilidad del juzgado y de la complejidad del caso. Generalmente, se notificará a las partes con antelación, asegurando que ambas tengan el tiempo necesario para preparar sus intervenciones.
Comunicación de la sentencia
Una vez finalizada la vista, el juez se tomará un tiempo para deliberar antes de emitir la sentencia. Esta puede ser comunicada en la misma sala del juicio o a través de un escrito que se notificará a las partes
Si el inquilino pierde el caso, deberá abandonar la propiedad en el plazo que determine la sentencia, que suele ser de unos días. Por el contrario, si el fallo es favorable para el inquilino, el desahucio quedará anulado, y este podrá seguir ocupando la vivienda.
Cuánto tarda un desahucio: Factores que influyen
Para determinar cuánto tarda un desahucio en Oviedo, son varios los factores que influyen en el tiempo que tarda en llevarse a cabo. Los principales:
Carga de trabajo del juzgado
Cada juzgado tiene asignado un número variable de casos, y cuando la carga de trabajo es alta, los tiempos de respuesta pueden aumentar. Los retrasos en la admisión de la demanda o en la programación de juicios son comunes en este contexto.
En algunos casos, un juzgado puede estar sobrecargado debido a un aumento en los procedimientos de desahucio en la zona. Esto puede derivar en espera prolongada para la asignación de fechas y la resolución de los casos presentados. La eficiencia administrativa del juzgado y la disponibilidad de personal también son factores determinantes.
Defensa del inquilino
Ya acabamos de mencionar que la acción que decida tomar el inquilino al recibir la demanda puede influir significativamente en la duración del proceso. Si el inquilino decide oponerse a la demanda, el caso se complicará y, por lo tanto, se extenderá. La defensa presentada puede añadir tiempo adicional y requerir una serie de pasos adicionales en el procedimiento legal.
La respuesta a la demanda también se puede ver afectada por la búsqueda de asistencia legal por parte del inquilino, lo que podría demorar su contestación y, en consecuencia, el desarrollo del proceso judicial. La habilidad del inquilino para presentar su defensa de manera efectiva puede influir en el tiempo que el caso permanece activo en el juzgado.
Situación de vulnerabilidad del inquilino
Si el inquilino presenta alegaciones de vulnerabilidad, esto puede llevar a otro nivel de complejidad en el procedimiento de desahucio. La legislación española contempla ciertas protecciones para individuos en situaciones de vulnerabilidad, lo que puede derivar en la suspensión temporal del procedimiento.
La solicitud de justicia gratuita es una opción que puede ser utilizada por inquilinos en circunstancias económicas difíciles. Si el inquilino logra conseguir este recurso, se abrirá un proceso adicional para evaluar su situación antes de continuar con el desahucio. Este trámite puede acelerar la resolución o, por el contrario, prolongarla, dependiendo del resultado de la evaluación.
Alegaciones de vulnerabilidad
Las alegaciones de vulnerabilidad pueden incluir asuntos como la situación familiar, problemas de salud, o cualquier condición que impida al inquilino afrontar un desahucio. Una vez presentadas, estas alegaciones obligan a los juzgados a considerar el contexto del inquilino, lo que puede suponer retrasos adicionales en la tramitación del caso mientras se evalúan las pruebas y se toman decisiones acordes.
Tipos de desahucio y plazos específicos
El desahucio en España puede clasificarse en diferentes tipologías. Los más relevantes son el desahucio por impago de alquiler, el desahucio por finalización de contrato y el desahucio por ocupación ilegal.
Desahucio por impago de alquiler
Este tipo de desahucio es el más común y ocurre cuando un inquilino no cumple con la obligación de pagar la renta acordada. El propietario tiene derecho a iniciar el proceso legal tras un mes de impago.
Cuánto tarda un desahucio de este tipo, no es posible responder taxativamente a la cuestión. Sí que podemos decir que en casos en los que el inquilino no presenta oposición, el proceso puede completarse en un plazo aproximado de 6 a 8 meses. Sin embargo, si el inquilino decide impugnar la acción, la duración del proceso puede extenderse entre 8 y 12 meses. En situaciones complicadas, la resolución puede alargarse más de un año.
Desahucio por finalización de contrato
Este tipo ocurre cuando el contrato de arrendamiento ha finalizado y el inquilino no desocupa la vivienda. En este caso, el propietario puede iniciar el desahucio aportando pruebas de la finalización del contrato y la notificación correspondiente al inquilino.
De nuevo, difícil responder a la pregunta de cuánto tarda un desahucio por finalización de contrato en Oviedo y Asturias. Suele ser más rápido que por impago, por norma general. Si el inquilino no presenta oposición y el juicio se desarrolla con normalidad, se podría finalizar en un plazo de 2 a 4 meses. Sin embargo, si el inquilino decide presentar alegaciones, el tiempo puede ampliarse considerablemente, llegando a tardar entre 6 a 12 meses en función de la carga del juzgado y la complejidad del caso.
Desahucio por ocupación ilegal
Este procedimiento se lleva a cabo cuando una persona ocupa una vivienda sin consentimiento del propietario. A raíz de una ocupación ilegal, el propietario tiene el derecho de solicitar la recuperación de su propiedad por la vía judicial.
El desahucio por ocupación ilegal suele ser un proceso más ágil. La ley permite que, en muchos casos, se realice un procedimiento sumario, que puede durar entre 1 y 3 meses si se dan las condiciones adecuadas y no hay oposición. Sin embargo, si el ocupante plantea resistencia o se presentan complicaciones legales, la duración puede extenderse más allá de los 6 meses, incluso varios años en situaciones más complejas.
Medidas que no se deben tomar contra el inquilino
Existen ciertas acciones que un propietario debe evitar en caso de enfrentarse a un inquilino moroso. Evitarlas porque pueden ser ilegales y porque también pueden perjudicar su situación en un eventual proceso judicial.
Lo primero que se nos pasa por la cabeza es cortar los suministros, agua, luz o gas. Esta acción es considerada un acto coercitivo que busca intimidar al inquilino para que pague, y puede acarrear serias consecuencias legales para el propietario.
El propietario debe ser consciente de que este tipo de medidas pueden ser perseguidas por la ley. Las empresas suministradoras también pueden tomar acciones legales en caso de que sean informadas del corte ilegal de servicios. La ley protege el derecho de los inquilinos a vivir en condiciones dignas y adecuadas.
Cambio de cerraduras
Cambiar las cerraduras del inmueble sin contar con una orden judicial previa es una acción considerada ilegal. Esta práctica puede ser vista como un intento de desalojo no autorizado, lo cual es un delito que puede acarrear consecuencias legales negativas para el propietario.
En caso de que el propietario decida recurrir a la justicia, los tribunales suelen evitar tomar en cuenta las pruebas obtenidas de manera ilegal, perjudicando la posición del propietario en el proceso judicial. Por eso, los abogados instamos siempre a seguir los procedimientos legales establecidos y no tomar decisiones unilaterales que puedan complicar la situación.
Coacción o amenazas
Por últimos, acometer actos de coacción o amenazas hacia el inquilino es otra conducta que hay que desterrar. Esto incluye cualquier forma de intimidación, ya sea verbal o física, con el objetivo de obtener el pago de rentas o de presionar al inquilino a abandonar el inmueble.
Las víctimas de amenazas y coacciones tienen el derecho de denunciar estos actos ante las autoridades. El propietario que adopte tal conducta no solo arriesga su imagen y reputación, sino que también pone en peligro su situación legal, exponiéndose a posibles demandas y sanciones.
Conclusiones
Responder con precisión y realismo a cuánto tarda un desahucio en Oviedo y Asturias es difícil. Tanto en Asturias como en el resto de España. Tal y como hemos mencionado en la información anterior, un desahucio por impago de renta oscila entre los 6 y 12 meses, mientras que uno por finalización de contrato, máximo se suele ir a los 5 meses de duración. En cuanto a la tan temida ocupación ilegal, sólo en casos muy extremos el desalojo se dilata, ya que, generalmente, es más ágil este procedimiento que los anteriores.
Un ejemplo claro que está en los medios es el que le ocurre al artista Manu Tenorio, en lucha contra el impago de los inquilinos de una vivienda suya en Sanlúcar de Barrameda.
En cualquier caso, hay que poner el asunto en manos de abogados especializados para solucionar el problema jurídicamente según los procedimientos estandarizados.